“Salir de mí”
Salir de mí y asomarme
al corazón hermano,
al corazón del hermano herido
que me tiende la mano
en el silencio de su vida desgarrada.
Salir de mí y asomarme
a mi propio corazón,
también herido por estar cerrado,
por no tener el valor de abrir los ojos
y extender las manos.
Salir de mí para mirarte de frente
en los ojos del hermano,
y poder descubrir dónde está
la verdadera fiesta del corazón.